Pues sí, un poco tarde pero al final he arreglado mis Reyes Magos de este año. Soy un poco especial para los regalos y como no suelo hacer carta pues es difícil que adivinen lo que deseo (otro día trataremos con más calma ese momento en el que uno pasa al mundo de los adultos de un segundo para otro y que explican en este enlace).
Sennheiser HD238 Precision
Tras una serie de movimientos y cambios he conseguido unos Sennheiser Precision HD238. De verdad, si os gusta mucho la música bien vale la pena que os gastéis un poco de dinero en unos buenos cascos. Desde hace poco uso unos Panasonic RP-HTX7 para grabar música y para mí tienen un grave inconveniente: al poco rato de usarlos las orejas están fritas de calor y si ya nos centramos en el sonido la respuesta quizás sea demasiado plana, como si tuviera una ecualización basada en las frecuencias medias.
Así que me decidí por los Sennheiser HD238 que tienen un diseño abierto (es decir, no los uses en sitios donde puedas molestar al que tienes al lado porque os aseguro que dejan escapar bastante sonido) y son con diferencia los cascos más cómodos que he usado nunca. Puedes estar horas y horas con ellos puestos sin darte ni cuenta que los llevas encima. Para mí son espectaculares a la hora de tratar música clásica, folk, pop, electrónica y rock clásico: he descubierto sonidos que ni sabía que estaban ahí. Eso sí, no los recomendaría para música más dura porque me da la sensación que no se comportan bien a volúmenes altos con las distorsiones.
De todos modos no me hagáis mucho caso porque tampoco soy ningún experto en el tema. Ahora toca disfrutar de ellos e ir preparando los oídos para unos Grado o unos AKG.
Boss ME-70
El segundo regalo fue un poco atolondrado: un vale de mi hermano para el Pocket Pod terminó convirtiéndose (con una pequeña diferencia 😉 ) en un Boss ME-70. Pero la culpa es de los dueños de la tienda que ponen las jugosas cajas ahí al alcance de la vista.
El señor Septi me ha echado un poco la bronca por no haber comprado el equivalente de Line6 y puede que tenga razón, pero por ahora el equipo ha cumplido todas mis expectativas, aunque con un inconveniente: paso más tiempo probando diferentes bancos de sonido y combinaciones de cabinets, pedales y modulaciones que tocando.
Además dispone de un efecto que nunca he tenido y que es realmente divertido: un loop station que te permite guardar unos acordes y a continuación tocar por encima de ellos (ver ejemplo aquí). Eso sí, está limitado a 35 segundos. Me da que en algún momento me pasaré al hermano mayor de los loops (nota para los reyes).. ¿quizás el Boss RC-2?
Y para rematar la faena hoy vuelve Lost a nuestras descargas bittorrent. No doy abasto.